EN DIRECTO DESDE EL MWC SHANGHAI 24: Akash Palkhiwala (en la foto, a la derecha), director de Finanzas y Operaciones en Qualcomm, ha celebrado el inminente impacto de la IA sobre todas las industrias que su empresa toma como objetivo, y ha destacado los nuevos casos de uso, sobre todo en el sector de automoción.

Qualcomm lleva varios años tratando de ampliar su cartera de productos más allá de los chips para smartphones. Ha entrado en sectores como la automoción, la RX, los PC y el mercado industrial, áreas que parecen dispuestas para la transformación que conllevará una tecnología de IA inmersa en una rápida expansión.

Al reflexionar sobre la hoja de ruta y los plazos que la empresa se ha fijado en dichos mercados objetivo, Palkhiwala ha señalado que los smartphones todavía son el “mercado base de Qualcomm” y que dichos dispositivos “se están transformando con la IA”.

A continuación ha destacado la automoción como un mercado en el que su firma se ha “establecido como líder en computación e IA en el propio dispositivo. Un montón de nuevos casos de uso de la IA generativa llegan al puesto de conducción”.

Por lo que respecta a la RX, considera que su empresa ya ha “demostrado su valía desde un punto de vista tecnológico, pero de todos modos la RX podría ser el dispositivo que experimente mayores transformaciones a causa de la IA generativa. El asistente de IA nos permitirá hacer lo que no podíamos hacer en el pasado, porque no nos limitará el factor de forma ni el tamaño de la pantalla. Todo esto podría cambiar. Estamos hablando de un dispositivo que podría provocar una ruptura muy significativa.

“Los siguientes en esta secuencia serán los PC y, por último, la industria.”

El directivo subraya que contemplar los mercados en forma de dicha línea temporal, “nos permite trazar una trayectoria a largo plazo”.

Automóviles inteligentes

Palkhiwala ha destacado el mercado del automóvil como un ámbito en el que la IA podría mejorar enormemente la experiencia del usuario. “Uno de los retos que nos plantea la experiencia del consumidor es que, cuando algo anda mal, se enciende una luz en el salpicadero y no sabemos qué es. Por ello, todo el proceso de averiguar qué le ocurre al coche, pedir cita y hacer que alguien lo repare se alarga innecesariamente.”

“¿Por qué no tomar un modelo de IA, entrenarlo con el manual del coche y ponerlo a disposición del usuario como experiencia de IA generativa, de modo que se pueda conversar con el automóvil sobre lo que va mal, y que sea el propio coche el que explique cómo repararlo? Sería un caso de uso sencillo, no plantearía grandes dificultades en el plano tecnológico, pero nos permitiría superar uno de los aspectos del coche que molestan al usuario. La experiencia del usuario cuando el coche tiene problemas es poco satisfactoria y eso podría cambiar.”