Vladimir Putin (en la foto), presidente de la Federación Rusa, ha dado luz verde a una filial de la operadora Rostelecom para que adquiera la participación de Nokia en la empresa conjunta especializada en software RTC – Network Technologies. Dicha operación aceleraría la salida de Rusia del fabricante finlandés.

Según el Moscow Times, Putin ha firmado un decreto por el que la filial –controlada por el gobierno ruso a través de varias firmas estatales de desarrollo y de un banco estatal– adquirirá el 49% de dicha empresa conjunta que ahora se halla en manos de Nokia. No se han dado a conocer los detalles financieros del acuerdo.

De acuerdo con las leyes impuestas por el gobierno ruso en respuesta a las sanciones derivadas de la guerra en Ucrania, todo acuerdo que implique la salida de una empresa occidental en áreas consideradas de importancia estratégica debe contar con la aprobación del presidente.

La empresa conjunta se creó en 2018. Por aquel entonces, Nokia y Rostelecom se comprometieron a efectuar inversiones conjuntas en tecnologías avanzadas, como por ejemplo la 5G e Internet de las Cosas.

Pero Nokia anunció en abril de 2022 su intención de abandonar Rusia, y desde entonces podía preverse que en algún momento se desprendería de sus intereses en la empresa conjunta.

Al anunciar su decisión de salir del país, la empresa finlandesa explicó que había tenido claro desde los primeros días de la invasión de Ucrania que no le sería posible mantener su presencia en Rusia.

Rostelecom había declarado con anterioridad que su modelo de negocio se ha visto gravemente afectado por la salida de Nokia del mercado.

Desde el inicio de la guerra de Ucrania, que ya dura más de dos años, Occidente ha situado en el punto de mira las redes de telecomunicaciones rusas, mediante sanciones a las exportaciones de tecnología y hardware.