Al escuchar los discursos de apertura de las tres grandes operadoras chinas en el MWC Shanghái 2024, me ha sorprendido que no se dieran más detalles sobre una tecnología que el principal fabricante de equipamiento para redes de telecomunicaciones de todo el país lleva varios meses promoviendo. Me refiero al impulso que Huawei está dando a la 5G-Advanced (5G-A), que ha alcanzado nuevos hitos durante los tres días de congreso.

Las intervenciones de las operadoras durante la primera jornada, de casi una hora de duración, se han centrado sobre todo en cuestiones de posicionamiento estratégico. Así, por ejemplo, en cómo la combinación de IA y 5G aportará nuevos métodos de producción y permitirá aplicar procedimientos de fabricación flexibles y personalizados en extremo.

Sorprendentemente, los presidentes de China Mobile y China Unicom se han referido a la 5G-A en una sola ocasión, mientras que el de China Telecom ha evitado mencionarla, pero sí ha destacado que su firma ha sido una de las primeras del mundo en establecer una conexión directa entre un teléfono 5G y un satélite, mediante tres tecnologías propias y planes de economía para altitudes reducidas (centrados en drones y redes no terrestres).

Yang Jie, presidente de China Mobile, dio el pistoletazo de salida al congreso asegurando que “nos hallamos en una nueva etapa en la revolución de la IA”.

El presidente añadió que su objetivo es “transformar y mejorar la oferta de servicios de información al público” de su empresa, al tiempo que se remodelan los servicios al consumidor mediante la integración de agentes de IA.

En su discurso, de 18 minutos de duración, se ha hecho eco en siete ocasiones del concepto rector “nuevas fuerzas productivas de calidad”, acuñado por el presidente chino Xi Jinping, que hoy en día ya se ha popularizado.

Por su parte, Ke Ruiwen, presidente de China Telecom, ha afirmado que “nos hallamos en la era de nube más Internet más IA”, por lo que la empresa quiere transformar el funcionamiento de sus redes, “para dar mayor agilidad y ligereza” a su red 5G.

Según Ke, la IA también contribuirá a ahorrar energía, reducir las emisiones de carbono y mejorar la experiencia del cliente.

Ha ofrecido algunos otros detalles. Así, ha prometido que su empresa seguirá mejorando la oferta de productos 5G integrados y promoviendo dispositivos industriales con capacidades 5G. La operadora también se servirá de modelos y tecnologías generativos para ampliar los casos de uso y “garantizar que las redes 5G cubran la mayoría de sectores industriales”.

Chen Zhongyue, presidente de China Unicom, ha animado a las operadoras a colaborar en el desarrollo de nuevas estrategias para reactivar el crecimiento de los servicios de comunicación.
Ha señalado que la adopción de servicios de banda ancha aumentó tan sólo un 2,3% en 2023, después de que el crecimiento alcanzara máximos en torno al 30% en 2014.

El “hito” de la 5G-A

Por su parte, David Wang, director ejecutivo del consejo de administración de Huawei, ha calificado como hito para la industria la formalización de la Release-18 del 3GPP, esto es, de los primeros estándares de la 5G-A, presentados el pasado mes de junio.

En una sesión celebrada un día antes del inicio del MWC Shanghái, Wang afirmó que se están desplegando redes 5G-A con el objetivo de atender los requisitos propios de la era de la IA. Así, ofrecen velocidades más rápidas, mayor capacidad y menor latencia. “Dentro de poco, las aplicaciones de la IA supondrán una contribución notable al tráfico móvil general, lo que comportará la necesidad de introducir mejoras”.

A juzgar por el escaso interés manifestado por los máximos directivos de las tres operadoras, cabe entender que las firmas del país, que han gastado billones de yuanes en el despliegue de casi 3,8 millones de estaciones base 5G durante los últimos cinco años, no sienten un gran entusiasmo por la siguiente generación de la 5G.

China Mobile, por sí sola, invirtió unos 100.000 millones de yuanes (unos 12.700 millones de euros) anuales en su red 5G durante dicho periodo. En marzo anunció sus planes generales de ofrecer conectividad 5G-A a más de 300 ciudades para finales de 2024, sin especificar la escala ni los casos de uso previstos. En junio afirmó que la cobertura llegaba a 35 ciudades.

Por otra parte, China Telecom ha celebrado una rueda de prensa en el segundo día de congreso a fin de hacer público su plan de acción en 5G-A. Pero su presidente, Liang Baojun, no ha ofrecido más detalles que el presidente Ke. Según afirmaciones de Liang, el plan se centrará en “profundizar en la investigación práctica en tres niveles distintos, a saber, desarrollo de capacidades, cooperación ecológica e implantación de aplicaciones”.

No se ha hecho mención de las ciudades a las que se quiere llegar, las zonas de cobertura prevista ni el número de estaciones base.

En un acto con la prensa, la recién llegada China Broadnet se ha manifestado con idéntica vaguedad sobre su plan de despliegue de la red 5G-A. China Unicom, por su parte, ha informado de que ya ha iniciado la realización de pruebas piloto comerciales.

Un analista con sede en Beijing ha declarado a Mobile World Live que, si bien las ambiciosas inversiones de las operadoras chinas en 5G han generado nuevo crecimiento, sobre todo en el segmento empresarial (líder en el mundo gracias a sus amplios despliegues), incluso las tres grandes operadoras consideran onerosa la inversión continuada en 5G-A les resulta onerosa, pese a la propuesta de valor que ofrece.

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