El gobierno español ha dado luz verde a Orange y MásMóvil para formalizar la fusión de sus respectivas operaciones en el país antes de que finalice el trimestre en curso. Con esta decisión se completan todas las autorizaciones necesarias para constituir una empresa conjunta al 50:50.

El ministro de Transformación Digital, José Luis Escrivá, ha declarado en la rueda de prensa tras el Consejo de Ministros que los compromisos de Orange y MásMóvil en materia de inversión en redes han convencido al gobierno de los beneficios de la operación.

El último requisito para los planes de Orange y MásMóvil era la aprobación de una transferencia de frecuencias por parte del gobierno, una vez ratificada la fusión por parte de la Comisión Europea (CE) el mes pasado.

Escrivá ha calificado de “ambiciosos” los planes de Orange y MásMóvil para invertir en sus redes fijas y móviles, y destaca que el gobierno confía en que la fusión refuerce un “mercado estratégico” en términos de seguridad y beneficio económico.

Las dos operadoras implicadas ya habían acordado vender parte del espectro de MásMóvil a la operadora virtual Digi Communications, lo que bastó para aliviar las preocupaciones de la CE sobre las consecuencias de la fusión en materia de competencia.

Orange indicó en su momento que la empresa resultante de la fusión tendrá más de 30 millones de clientes de telefonía móvil y 7,3 millones de clientes de línea fija.