Kaan Terzioglu (en la foto), consejero delegado de Veon, ha instado a que se busque una salida para la guerra entre Ucrania y Rusia, ahora que la elección de Donald Trump para un segundo mandato como presidente de Estados Unidos ha aumentado las posibilidades de que el conflicto finalice.

Terzioglu, que dirige la empresa matriz de la principal operadora de Ucrania, ha declarado a Bloomberg que los empleados de Kyivstar siguen trabajando duro para mantener en funcionamiento la red de la empresa, pero ha añadido que las familias están cada vez más fragmentadas y que es necesario reavivar la esperanza. Según ha dicho, “necesitamos reconstruir Ucrania”.

La reciente victoria de Donald Trump en las elecciones estadounidenses ha suscitado rumores sobre un posible final de la guerra, que ha durado ya tres años, debido a que el presidente electo expresó durante la campaña electoral su intención de negociar un acuerdo de paz.

En relación con la toma de posesión de Trump en enero y su previsible impacto sobre Ucrania, Terzioglu ha declarado a Bloomberg que el pueblo ucraniano ha peleado bien y “merece una solución digna”.

Y ha añadido que “todo avión que despega tendrá que aterrizar en algún momento. Toda guerra tiene que terminar.”

Veon no es sólo propietaria de Kyivstar, sino que también había operado durante mucho tiempo en Rusia. Había gestionado una de las principales redes móviles del país bajo la marca VimpelCom, ya abandonada.

En 2023, Veon vendió su filial rusa a su equipo directivo local por 2.200 millones de dólares (unos 2.000 millones de euros) y abandonó el país.

Desde que empezó la guerra, ha concentrado sus esfuerzos en Ucrania y se ha comprometido a invertir 1.000 millones de dólares (unos 950 millones de euros) en la reconstrucción de su infraestructura de telecomunicaciones.