Apple ha confirmado su rumoreada compra de la empresa Beats Electronics, fabricante de auriculares y proveedora de un servicio de música en streaming, por un importe de 3.000 millones de dólares (2.200 millones de euros). A través de un comunicado, Tim Cook, el consejero delegado de Apple, ha asegurado que “la música es una pieza muy importante de todas nuestras vidas y ocupa un lugar muy especial en nuestros corazones en Apple. Por eso seguimos invirtiendo en música y en combinar estos extraordinarios equipos, para poder seguir creando los productos y servicios musicales más innovadores del mundo”. En virtud de la operación, los cofundadores de Beats, Jimmy Iovine y Dr. Dre, se incorporarán también a Apple. Aproximadamente 2.600 millones del precio de compra serán abonados de inmediato, mientras que los otros 400 millones vencerán al cabo de un tiempo.

 

Eddy Cue, vicepresidente de software y servicios de Apple, afirma que “la incorporación de Beats mejora todavía más nuestra oferta en materia de música, que ahora abarca desde el streaming gratuito de iTunes Radio hasta el servicio por suscripción de primera categoría de Beats, sin olvidar la compra de música en la iTunes Store que nuestros clientes utilizan desde hace años”.

 

Las primeras reacciones a la compra han sido diversas. Si bien el servicio de música de Beats es complementario de la propuesta de Apple, no es precisamente el líder del mercado. Y aunque Beats aportará a Apple una nueva fuente de ingresos por hardware, su potencia se debe principalmente a la marca y al marketing, más que a los logros técnicos.

 

HTC, el asediado fabricante taiwanés de dispositivos, había tenido una participación significativa en Beats, cuya marca aparecía destacada en sus smartphones de gama alta. Pero la empresa vendió el año pasado sus acciones de Beats.