Los pronósticos de Corea del Sur sobre las ventajas económicas de la 5G han impulsado a Luigi Gambardella (en la fotografía), presidente de la Asociación Europea de Operadores de Redes de Telecomunicaciones (ETNO, European Telecommunications Network Operators), a preguntarse “¿Y dónde está Europa? Las cifras nos indican claramente que la carrera ya ha comenzado”.

Gambardella se manifiesta impresionado por el optimismo de las previsiones que llegan del país asiático.

La industria europea de las telecomunicaciones ha estado históricamente en vanguardia de la innovación desde los primeros días del GSM, asegura, y todavía representa aproximadamente un 40% del mercado mundial de suministros para redes.

Y el objetivo para la 5G debería ser el de asegurar el liderazgo en aquellas áreas en las que Europa es potente o en las que existen nuevos mercados potenciales, afirma.

Gambardella aplaude el anuncio de la Alianza Público-Privada por la 5G (5G PPP) realizado en diciembre por la Comisión Europea, que prometió una aportación de 700 millones de euros que el sector privado complementará con otra de aproximadamente el mismo importe.

No obstante, Gambardella también aprovechó la ocasión para defender la reforma de la política europea sobre el espectro, citando un informe realizado por Boston Consulting Group el año pasado por encargo de la ETNO, y que indica que dicha reforma liberaría 10.000 millones de euros en flujo de caja, que se podrían dedicar a invertir en nuevas redes. La ETNO apoya las propuestas realizadas por Neelie Kroes en este ámbito, asegura.

El ministerio coreano de Ciencia pronostica que las ventas totales de equipos relacionados con la 5G ascenderán a 331 billones de won (226.000 millones de euros) entre los años 2020 y 2026. Asimismo, el país tiene previsto invertir unos 1.100 millones de euros hasta 2020 entre operadores y proveedores locales para construir redes 5G.