La inesperada decisión del gobierno estadounidense de eximir de aranceles recíprocos a smartphones, ordenadores y otros productos ha supuesto un alivio temporal para los proveedores internacionales. Sin embargo, los analistas opinan que dicho giro agrava la elevada incertidumbre a la que se enfrentan las cadenas de suministro del mundo entero.

Ming-Chi Kuo, analista de TF International Securities, ha escrito con fecha de 13 de abril que la impredecible política arancelaria del gobierno estadounidense “supone la mayor incertidumbre a corto plazo para el suministro del iPhone”.

El analista añade que, si bien la medida reduce del 145% al 20% los aranceles aplicados a China, la presión sobre Apple sigue siendo significativa.

Kuo empieza por explicar que las líneas de ensamblaje en China donde se producen smartphones con destino a Estados Unidos todavía no han reanudado su funcionamiento, lo que parece implicar que Apple planea fabricar exclusivamente en India las unidades destinadas al mercado estadounidense a partir del año actual.

Ivan Lam, analista principal de Counterpoint Research, ha declarado a Mobile World Live que, a la vista de los problemas arancelarios y de la creciente incertidumbre, los fabricantes acelerarán las medidas en curso para trasladar a otros países el ensamblaje realizado en China y hallar proveedores alternativos.

Lam ha señalado que Samsung ya ha trasladado gran parte de su producción de smartphones y tabletas a Vietnam e India. Sin embargo, el analista cuenta con que los esfuerzos de diversificación de la empresa se aceleren.

El analista ha destacado que, si bien aún no se han adoptado medidas contra el sector de chips chino, estas podrían imponerse en el futuro. Por ahora la exención cubre los principales productos de electrónica de consumo destinados a Estados Unidos, lo que da un respiro a los proveedores chinos.

Del mismo modo que los smartphones y ordenadores portátiles, también los discos duros, procesadores y chips de memoria, pantallas planas y equipamiento de fabricación de chips están exentos del arancel del 125% aplicado a China y del arancel global básico del 10% para otros países.

Hace poco, Reuters informó de que se habían transportado en torno a 1,5 millones de iPhones desde India a Estados Unidos para adelantarse a los aranceles y aumentar las existencias en dicho país, principal mercado de dicho producto.