Borje Ekholm (en la foto), consejero delegado de Ericsson, ha destacado el creciente interés de los clientes por las redes programables, así como los indicios de que el mercado general de equipamiento se ha estabilizado durante el tercer trimestre, aunque también ha advertido de que las ventas de la división de empresas sufrirán presiones en el corto plazo.

El directivo ha destacado en el estado de resultados financieros de la empresa que el mercado norteamericano ha vuelto a la senda del crecimiento y que parece que dicha tendencia va a continuar. Ha anticipado que las ventas generales de su división de redes experimentarán una estabilización de carácter interanual durante el cuarto trimestre, como consecuencia de sus resultados en dicha región.

En el tercer trimestre, la empresa ha registrado una nueva caída en ventas que la ha dejado con 61.800 millones de coronas suecas (unos 5.400 millones de euros), lo que supone un descenso del 4%. En cambio, ha obtenido beneficios netos de 3.900 millones de coronas suecas (unos 340 millones de euros) frente a las pérdidas de 30.500 millones de coronas suecas (unos 2.700 millones de euros) del tercer trimestre de 2023, si bien esta última cifra incluía un cargo por deterioro de 32.000 millones de coronas suecas (unos 2.800 millones de euros).

Según Ekholm, dichos resultados demuestran los “avances” de la empresa, “con una fuerte expansión del margen bruto y el flujo de caja disponible, habiéndose beneficiado de su disciplina comercial y de sus acciones orientadas a la eficiencia operativa”.

El directivo añade que “si bien el desarrollo del mercado se halla en última instancia en manos de nuestros clientes, trabajamos para poder ofrecer excelencia operativa, con independencia de las condiciones de dicho mercado”.

Ekholm se ha referido al interés de los clientes “por las redes programables que ofrecen un rendimiento diferenciado” y ha expresado la expectativa de que esto vaya a más, gracias en parte a la empresa especializada en API (siglas inglesas de interfaz de programación de aplicaciones) creada conjuntamente con un grupo de operadoras, que se presentó en setiembre.

Aunque se haya centrado sobre todo en los aspectos positivos, Ekholm ha reconocido que se espera que la división de empresas sufra “una mayor presión a corto plazo en materia de ventas”, al concentrar sus esfuerzos en segmentos rentables.

Ha señalado que la firma lanzó durante el tercer trimestre “una nueva cartera de productos empresariales para 5G privada, a fin de respaldar la mejora del rendimiento, que todavía es una prioridad clave”.

Ekholm ha expresado su optimismo sobre el mercado de redes pocos días después de que la firma de analistas Dell’Oro Group pronosticara que los ingresos debidos a la RAN seguirán cayendo hasta que empiecen las inversiones en la 6G.