Costa Rica se une al grupo de países con 5G autónoma (SA) gracias a un despliegue de equipos de Nokia para el operador local Radiográfica Costarricense (RACSA), un proyecto que cubrirá en última instancia 500 emplazamientos.

El suministrador finlandés está ejecutando el contrato con equipos de su gama AirScale, con un despliegue inicial que cubre 30 ubicaciones en ciudades importantes como San José, Cartago y Limón, así como en algunas zonas rurales.

Nokia ha señalado que el objetivo para 2024 es encender 170 emplazamientos para luego expandir la cobertura hasta los 500. Asegura que las velocidades de datos y la baja latencia proporcionadas por la 5G autónoma beneficiarán tanto a consumidores como a empresas, además de impulsar el desarrollo de servicios de la internet de las cosas (IoT).

Otra característica de la red es la capacidad de acceso inalámbrico fijo (FWA, por sus siglas en inglés), según ha explicado Nokia, citando una predicción de GSMA Intelligence que anticipa un crecimiento sostenido de esta modalidad en comparación con otros enfoques de conectividad de banda ancha.

Junto a las radios Massive MIMO, las unidades de radio remotas y las estaciones base, RACSA ha seleccionado el sistema de gestión de redes MantaRay de Nokia. El proveedor ha explicado que este sistema ofrece una “visión unificada y automatizada de la red” para mejorar el control del operador.

El despliegue también incluye infraestructura de núcleo compatible de Nokia.

Mauricio Barrantes, director general de RACSA, ha afirmado que el despliegue de la red 5G autónoma es un “paso crucial en la transformación digital de Costa Rica”, lo que mejorará “la calidad de vida” de los ciudadanos.